martes, 12 de enero de 2010

DIA 31. MIAMI BEACH II

 
Caseta de vigilantes de Miami Beach

  
Escenario del concierto

 
Miami Beach. 86ºF---30ºC.

 Ocean Drive

 
Maniqui ajustada a las medidas que gastan algunas chicas en Miami

Cambiamos de alojamiento de la zona norte a la zona sur de Miami Beach. El Jazz On South Beach Hostel ya lo teniamos reservado desde hace un par de meses pensando que solo pasariamos una noche en Miami. Este hostel fue el unico que pudimos conseguir adecuado a nuestra economia viajera.
Como hasta las 15:00 no podiamos hacer el Chek in, dejamos el equipaje en el hostel y fuimos a darnos una vuelta por Miami South Beach. Como el domingo se celebra la Super Bowl, había aun mas gente de lo normal por la calle.
Ocean Drive es la avenida donde estan montados todos los chiringuitos de la Super Bowl y todas las marcas aprovechan para hacer publicidad. Mientras caminas por la calle te van obsequiando con distintos productos, como detergentes, mecheros, latas de refrescos, etc, etc. Incluso hay una marca de detergentes que tiene un chiringuito donde puedes diseñarte tu propia camiseta gratuitamente. No sabemos si nos cabrá todo en las maletas.
Fuimos a comer un Pad Tai a un Restaurante Tailandes para cambiar de dieta y recordar la comida de nuestros viajes por Asia. Comimos muy bien. Pagamos con tarjeta de credito y al salir por la puerta nos sale la camarera y me dice:

Camarera- ¿Es que no les gusto la comida? ¿No se les sirvió bien?
Yo- Si, nos gusto mucho.
Camarera- Pues no han pagado la propina.
Yo- En mi pais la propina es voluntaria.
Camarera-Pero esta usted en Estados Unidos y aqui se paga propina.
Yo- ¿Pero es obligatoria?
Camarera- No, pero...
Yo- Pues hasta luego y gracias.

Nos dijo adios con mala cara, pero nosotros nos quedamos con nuestros 10$ en el bolsillo.

En los paises anglosajones es normal añadir a la cuenta el 15% o 20% de propina y es algo que nos toca mucho las pelotas, hablando claro. Es verdad que los pobres camareros cobran la mayoria de su sueldo en propinas, pero pensamos que eso se le deberian pagar sus jefes, no los clientes. Bastante abultadas estan las cuentas de los restaurantes como para tener que pagar ademas el sueldo del camarero.
Comentamos esto porque es una cosa que nos fastidia bastante y cuando te pones a pensar que le dimos 7$ de propina a un chaval en Nicaragua que nos guió hasta la cumbre de un volcán durante 7 horas y aqui por servirte dos platos de comida y dos cervezas, te piden 10$ y encima se indignan si no se los das...

Volvimos al hostel y nos dieron la habitacion de cuatro camas. Nos echamos un rato para relajarnos y cuando pensabamos que tendriamos la habitacion para nosotros solos, entro Mark, un  tio de Georgia muy simpatico que seria nuestro compañero de cuarto. Lastima que la lengua de Shakespeare no sea lo nuestro y no pudimos conversar mucho con él.
La tarde-noche la pasamos paseando por Ocean Drive y observando la fauna que se mueve por alli. Parece que no existe el termino medio en Miami, o eres un obeso de 150 kilos o vas sin camiseta marcando abdominales, o exhibiendo unas enormes tetas de silicona.
En la playa habian instalado un escenario con concierto gratuito de Nelly Furtado, Paulina Rubio y Pitbull, pero ademas de que tampoco es que nos ilusione mucho ver un concierto de esta gente, las colas eran tremendas.

 
Este video no es del concierto, es Ocean Drive de noche 

Pronto nos retiramos a nuestra habitación y Marc ya se habia marchado. Llegó de madrugada y aunque no encendió la luz ni hizo mucho ruido, nos desperto. Eso no fue lo peor. El muchacho se durmió enseguida y empezó el concierto de clarinete y corneta. El muy jodio roncaba como si tuvieramos un trailer arrancado dentro de la habitación. El pobre no tenia la culpa, pero yo dormi muy poco esa noche. Merce como siempre casi no se enteró. Pero eso no fue todo, parece que nuestro amigo Mark se habia bebido toda la cerveza de Miami Beach y se levantó al menos cinco veces a mear.

Moraleja: Nunca mas dormiremos en habitación compartida con roncadores desconocidos.


Jazz On South Beach Hostel (18$ p/p)
Un hostel muy recomendable, limpio, con lavanderia, cocina comunitaria, sala comun, terraza, wifi y todo lo necesario alojarse dignamente en South Miami Beach y no dejarse el sueldo. Si dispusiera de habitaciones dobles seria perfecto, nos hemos dado cuenta que estamos demasiado mayores para compartir habitacion con desconocidos.

2 comentarios:

  1. Pienso en tu cara de circunstancia escuchando el concierto de tu "amigo" Mark y me parto de la risa, jajjajaa yo me hubiera ido a ver a Nelly y Pau :)

    ResponderEliminar
  2. Y eso que dicen que yo tambien doy algun concierto de vez en cuando.

    ResponderEliminar

Por favor cuando hagais un comentario poned vuestro nombre.